Los presidentes de las 20 regionales de la Asociación Rural del Paraguay (ARP) manifestaron, este 1 de setiembre, en consonancia con el gremio que las representa y de las asociaciones incorporadas a esta, su categórico rechazo a cualquier intento de suspender la vacunación contra la fiebre aftosa, mientras no existan beneficios concretos, significativos y comprobados para el sector productivo y para el país. Esta postura se da en el contexto de la propuesta del Senacsa de que Paraguay transite hacia un nuevo estatus sanitario de país libre de la enfermedad sin inmunización.
“Reconocemos la histórica alianza público-privada que ha fortalecido el sistema de salud animal en nuestro país y destacamos la importancia de seguir construyendo diálogos responsables y a la altura del profesionalismo que ha caracterizado a esta alianza por varias décadas, un modelo reconocido a nivel mundial. Destacamos la apertura del Gobierno nacional para escuchar las voces del sector genuinamente representadas por la ARP desde 1885, una senda que debemos continuar por el bien del Paraguay”, señalaron mediante un comunicado.
Reiteraron que la decisión de abandonar la vacunación debe estar sustentada únicamente en un análisis técnico serio y en ventajas reales que justifiquen plenamente el riesgo que asumiría el Paraguay, por más mínimo que sea este. “Mientras tales condiciones no estén presentes, es irresponsable siquiera considerar esa posibilidad”, refieren.
En conferencia de prensa los dirigentes recordaron que Paraguay ha construido durante décadas un sólido estatus sanitario, considerado uno de los pilares de la economía nacional. “Un brote de fiebre aftosa significaría no solo un golpe devastador para miles de productores, sino también para la estabilidad económica nacional, el empleo rural y la confianza internacional en nuestra carne”, advirtieron.
En la actualidad, la ganadería representa el 12 % del Producto Interno Bruto (PIB) y el 14 % de las exportaciones totales del país. Por ello, las regionales sostienen que cualquier cambio en la estrategia sanitaria debe estar respaldado por un análisis técnico riguroso y ventajas reales que compensen el riesgo. “Paraguay ha construido durante décadas un estatus sanitario, que hoy es uno de los principales pilares de nuestra economía. Cualquier retroceso en este sentido pondría en serio riesgo la producción ganadera, que aporta el 12 % del Producto Interno Bruto y representa el 14 % de las exportaciones totales”, indicaron.
Asimismo, los presidentes destacaron la histórica alianza público-privada que ha fortalecido la sanidad animal en Paraguay, un modelo reconocido a nivel mundial, y valoraron la apertura del Gobierno nacional para escuchar a la ARP, institución que desde 1885 representa a los productores pecuarios del país.
“Mientras tales condiciones no estén presentes, es irresponsable siquiera considerar esa posibilidad”, expresaron y dejaron en claro que la vacunación sigue siendo una responsabilidad histórica y una obligación con Paraguay.
Consulta Pública. En medio del debate en torno a la intención de que Paraguay deje de inmunizar su rodeo contra la fiebre aftosa y adquiera un nuevo estatus sanitario de país libre de esta enfermedad sin vacunación, el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) anunció la apertura de una consulta pública sobre la propuesta del “Plan Estratégico 2018-2028 del Programa de Erradicación de la Fiebre Aftosa”, que está disponible desde el 18 de agosto y se extenderá por 15 días hábiles, hasta el próximo viernes 5 de setiembre de 2025.
Razas Unidas. El 22 de agosto las asociaciones de criadores de cinco razas bovinas (Braford, Brangus, Brahman, Nelore y Senepol) presentaron un comunicado conjunto en el que manifestaron de manera firme y categórica su rechazo a la posibilidad de levantar la vacunación contra la fiebre aftosa.
Por su parte, el 26 de agosto, la Asociación Rural del Paraguay (ARP) también reafirmó su postura de no acompañar ningún intento de suspender la vacunación contra la fiebre aftosa, salvo que existan beneficios reales, comprobables y contundentes para el país, y de esta forma le brindó su respaldo a las asociaciones de criadores de razas bovinas, que habían expresado su no rotundo al levantamiento de las jeringas.
El 27 de agosto Razas Unidas volvió a pronunciarse y por medio de un comunicado los gremios manifestaron su malestar con las decisiones unilaterales emprendidas por el Senacsa, entre las cuales citan comunicaciones inconsultas y medidas adoptadas sin diálogo ni consenso, como la apertura de un período de consultas públicas que -aseguran-, lejos de ser un mecanismo de participación, “busca justificar una determinación ya adoptada: el levantamiento de la vacunación contra la fiebre aftosa”.
[Foto: conferencia de prensa de los presidentes de las 20 regionales de la ARP / Gentileza ARP]