El consumo de carne aviar en Paraguay experimentó un crecimiento sostenido en los últimos diez años, duplicando su nivel y alcanzando actualmente los 38 kilos per cápita, según destacó a Productiva C&M, Blanca Ceuppens, presidenta de Granja Avícola La Blanca. La proyección del sector es llegar a los 40 kilos per cápita en el corto plazo, siempre que se mantengan las condiciones de mercado.

 

El consumo de la carne de pollo en Paraguay tuvo una expansión importante durante los últimos 10 años, pasando de un promedio de 19 kilos a 38 kilos per cápita, generando una demanda importante en la plaza interna. Ahora, el objetivo es llegar a los 40 kg de consumo anual por persona.

 

Ceuppens explicó que, pese a los avances, existen desafíos coyunturales que podrían impactar en la dinámica regional, como el brote de influenza aviar en Argentina y Bolivia, que generó un exceso de oferta en Sudamérica debido a las restricciones de exportación aplicadas a la producción, principalmente a la argentina. “Debemos ver cuál es la reacción de las autoridades sanitarias de Argentina para que puedan volver a declararse libres de la enfermedad y retomar sus exportaciones”, señaló.

 

En cuanto a la producción avícola local, la dirigente resaltó que Paraguay registró un crecimiento del 70% en la última década, acompañado de la apertura de nuevos y atractivos mercados internacionales. “Hemos ganado mercados interesantes tanto en precios como en productos que no son tan demandados a nivel local”, apuntó.

 

Uno de los logros más recientes y significativos para la industria es la habilitación de Filipinas para las tres carnes paraguayas: bovina, porcina y aviar. “Esto no suele suceder, ya que normalmente las habilitaciones se hacen por tipo de carne. Para nosotros es un éxito total porque además se trata de un mercado asiático con gran demanda de ciertos productos que constituyen excedentes en Paraguay”, celebró Ceuppens.

 

Con este escenario, la industria avícola paraguaya se consolida como uno de los sectores de mayor dinamismo dentro de la producción de alimentos, con un fuerte impacto en el consumo interno y crecientes oportunidades de exportación.