Con la cotización actual de la soja, que se muestra estable entre USD 330 y USD 350 la tonelada, y con los precios altos de los insumos, principalmente el fertilizante, la cosecha de la oleaginosa debe llegar a los 3000 kg por hectárea para que puedan cerrar los números para el agricultor, expresó a Productiva C&M, el productor de la zona de Nueva Esperanza, Canindeyú, Neivo Fritzen.
Fritzen, quien también es miembro de la Comisión Directiva de la Asociación de Productores de Soja, Oleaginosas y Cereales del Paraguay (APS), afirmó que se mantiene bastante nivelada tanto la expectativa del mercado como la necesidad actual de cosecha por los 3000 kg por hectárea para poder cerrar los números para el productor y tener un poco de ganancia. “Poder ir salvando los degastes de maquinarias y otros gastos para ir reponiendo”, subrayó.
El productor recordó que los precios de la soja vienen bastante estables, alrededor de USD 330 y USD 350 la tonelada. “No bajan ni suben de ese nivel y los costos sí en algunos momentos se presentaron bastante altos”, remarcó.
Resaltó que el precio del abono está elevado y que en este periodo de la campaña agrícola se esperaba un precio más moderado.
“En vez de bajar subió aún más, estamos hablando de fósforo, alrededor de USD 1000 la tonelada, tendría que estar USD 600 o USD 700 máximo; tenemos después el cloruro de potasio, que es un insumo importante también, que debía estar por debajo de los USD 500 y está por los USD 600 la tonelada y así sigue”, lamentó.
Agregó que la baja del dólar frente al guaraní también tuvo su incidencia en el cálculo del agricultor. “Necesitamos casi un dólar ahora para comprar un litro de gasoil, son detalles que afectan al sector productivo”, aseguró.
Para esta campaña se espera una siembra aproximada de 3.6 millones de hectáreas y una producción de 11 millones de toneladas. Actualmente, el avance de siembra a nivel país se estima en torno al 60 %.