La Red de Ensayos de Evaluación Ideagro (REEI) demostró que el 41,5 % del rendimiento del maíz en el Chaco es explicado por el ambiente, mientras que un 19,5 %, por el híbrido (genotipo) y 19,1%, por la interacción del híbrido con el ambiente, según lo destacó en Nación Productiva el Ing. Agr. Jenny Dueck, coordinador técnico de la red de ensayos, quien enfatizó, además, la importancia de la rotación de cultivos, uso de cobertura y una correcta elección de fecha de siembra para darle soporte a la productividad superior del cereal en esta región del país.
El manejo del suelo es el factor más importante para conseguir mejores rendimientos de maíz en la agricultura chaqueña, mencionó el profesional en Nación Productiva, ocasión en la que analizamos los resultados de la REEI de soja, maíz y sorgo de la campaña 2024/2025 presentados el pasado 11 de setiembre durante la 8º Jornada Sostenible de Cultivos de Verano.
Durante la evaluación de la red chaqueña de ensayos, el análisis demostró que el 41,5 % del rendimiento es explicado por el ambiente, mientras que un 19,5 %, por el híbrido (genotipo) y 19,1%, por la interacción del híbrido con el ambiente. “Y ahí encontramos que el ambiente tiene la mayor responsabilidad en el rendimiento; no olvidemos de ocuparnos del ambiente, que en este caso, es el suelo o el manejo que le damos”, manifestó.
Dueck destacó que en la Red de Ensayos de la Fundación Ideagro fueron evaluados 18 híbridos de maíz de ocho empresas. Agregó que este año se logró aumentar la cantidad de localidades o lugares de evaluación hasta llegar a nueve sitios instalados y cosechados. “Básicamente, en maíz evaluamos el rendimiento de granos y también la densidad y su efecto en el rendimiento”, subrayó.
Según el profesional, el rendimiento fue bastante bueno, considerando que en los últimos años la cigarrita tuvo su efecto sobre la productividad de este cultivo, y que en este 2025 se pudo superar los niveles de las temporadas anteriores. “Estamos, por un lado, muy contentos de superar 4000 kg en promedio, considerando que hay diferentes ambientes evaluados”, explicó.
Dueck enfatizó que el manejo del suelo es el factor más importante para conseguir mejores rendimientos y que el productor indefectiblemente debe trabajar con rotación de cultivos, uso de cobertura, la tecnología de siembra directa y la correcta elección de fecha de siembra para apuntar a mejores techos productivos.
Explicó que las comparaciones dentro de la red de ensayos se realizan con los híbridos que las empresas proporcionan, por lo que cree importante que los materiales que se destacan puedan seguir participando, de modo a continuar midiéndolos y compararlos con los nuevos híbridos.
“Si un híbrido un año se destaca y el próximo año no participa, es una lástima para nosotros, pero dependemos netamente de lo que nos ofrecen las empresas. En soja sí tenemos algunos testigos que nos guían de referencia; sería bueno que los maíces destacados sigan participando por varios años”, remarcó.
Dueck señaló que el equipo de evaluación decidió bajar la cantidad de localidades para el siguiente periodo de prueba, ya que demandó una elevada inversión visitar los nueve sitios para realizar la siembra y también para las empresas que tienen que ofrecer una bolsa de semillas para cada lugar. “En la próxima campaña vamos a tener siete localidades bien distribuidas, tal vez más hacia el norte”, expresó.
Dentro de la red de ensayos para los materiales de maíz, el híbrido P 40537 PWU se destacó como el de mayor rendimiento con un promedio de 6248 kg/ha y fue el único con mayor productividad. En el segundo y tercer nivel de rendimiento están los híbridos NS 71 VIP3 (5672 kg/ha) y NS 44 VIP3 (5443 kg/ha), respectivamente.
[Foto: Jenny Dueck / Productiva C&M]