El Dr. Daniel Prieto, presidente de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), aseguró que, actualmente, los productores están convencidos de que se debe seguir vacunando el hato bovino contra la fiebre aftosa. Agregó que tomar una decisión apresurada podría ser perjudicial para el país e implicaría correr un riesgo innecesario, además de que no hay ningún beneficio directo que le motive al sector a suspender la inmunización. Precisó que el gremio tiene la certeza de que se debe trabajar dentro de un nuevo programa 2025-2030 y a partir del 2028 ir evaluando la situación de los países vecinos como Brasil y Bolivia, que ya tomaron la decisión de levantar las jeringas, de modo a determinar si le conviene o no a Paraguay seguir el mismo camino.  

 

En conversación con Productiva, Prieto Davey, quien participó del lanzamiento del Congreso Brangus, que se desarrollará en Paraguay en mayo de 2028, aseguró que hay otros temas pendientes que deben seguir siendo trabajados antes de decidir si se dejará de vacunar o no contra la fiebre aftosa. No obstante, celebró el hecho de que el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) haya establecido una mesa de diálogo para debatir si apuntar o no a un nuevo estatus sanitario y reconoció el trabajo que viene desarrollando, que ha permitido la apertura de nuevos mercados.

 

“Bueno, realmente hicimos una mesa de trabajo, nosotros felicitamos el trabajo y la confiabilidad que viene teniendo Senacsa, un servicio muy confiable y la prueba es la apertura de nuevos mercados internacionales muy exigentes como Estados Unidos y trabajamos muy bien con el modelo exitoso de alianza público-privada a través de la Fundassa, pero, en definitiva, desde la Rural estamos convencidos de que hay que hacer un nuevo programa 2025-2030 con  una reunión en el 2028 para ir evaluando la situación de los países vecinos como Brasil y Bolivia que ya han tomado esta decisión”, refirió.

 

Prieto aclaró que, si en algún momento amerita, se puede tomar la decisión, pero que, actualmente, se necesita seguir trabajando en otras áreas como la previsibilidad del sector, construcción de la confianza y promoción de la marca país.

 

“En algún momento, si amerita, se puede tomar la decisión, pero hoy por hoy estamos convencidos de que tenemos que seguir vacunando. Nosotros consideramos que hay materias pendientes antes que esta decisión y una de ellas es volver a tomar la previsibilidad del sector, volver a trabajar la construcción de confianza, de transparencia, de promoción, trabajar en la marca país. Pero también estamos seguros de que la decisión que tomemos la haremos en conjunto”, comentó.

 

El presidente de la ARP aclaró que Paraguay no tiene ningún beneficio directo que le motive a correr el riesgo de dejar de vacunar y que el gremio es consciente de que tomar una decisión apresurada podría ser muy perjudicial para el país.

 

“Hoy por hoy no tenemos ningún beneficio directo, no tenemos mercados que ofrezcan un diferencial importante, capaz tengamos beneficios indirectos como más penetración del producto, pero beneficio directo no tenemos y que el riesgo es muy alto si tomamos esa decisión. Creemos y estamos seguros de que podría ser algo muy perjudicial para el país si ocurre un suceso y los más afectados serían los pequeños productores. Para un sector como el ganadero, que tiene un peso muy importante en la economía del país, que ingresa más de USD 2000 millones, creemos que no es oportuno ese riesgo”, concluyó.

 

[Foto: Dr. Daniel Prieto Davey, presidente de la ARP, durante el lanzamiento del Congreso Brangus, que se realizará en Paraguay en mayo de 2028 / Productiva C&M]