La lectura de etiquetas y hojas de seguridad de los fitosanitarios es un punto muy importante al momento de utilizar los plaguicidas en la producción agrícola. CropLife Latin America, en ese sentido, ha lanzado una serie de sugerencias prácticas para la utilización responsable de estos productos.

 

Las etiquetas y las hojas de seguridad de los plaguicidas forman parte del uso correcto del producto, pues informan sobre los cuidados y precauciones que se deben tener en cuenta al momento de manipularlos, aplicarlos, almacenarlos o transportarlos.

 

La lectura de estos productos es obligatoria y constituye una de las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) que se deben seguir al momento de utilizar un fitosanitario. Este sencillo acto garantiza el manejo correcto del producto, la aplicación para el control de plagas o enfermedades en la dosis adecuada y la seguridad del aplicador y del ambiente, sin riesgos innecesarios como desarrollo de resistencia y contaminación.

 

Cada plaguicida se debe leer en cinco momentos, que van desde que se compra el producto hasta almacenarlo, durante el proceso de mezcla o preparación y antes de aplicarlo. Asimismo, cuando se dispone del envase vacío y en la eventualidad de tener una intoxicación involuntaria o accidental.

 

“Recuerda siempre leer la etiqueta y las instrucciones que se encuentran en la hoja de seguridad, pues así respetarás las indicaciones que estas contienen para preconsumo – consumo y posconsumo. Esta buena práctica te garantizará el uso seguro y responsable de los productos fitosanitarios”, resalta el informe de CropLife Latin America.

 

De acuerdo con normas internacionales y nacionales, los productos fitosanitarios de protección de cultivos o plaguicidas de uso agrícola, doméstico y de salud pública deben contar con una etiqueta y una hoja de seguridad con información fundamental.

 

Entre las informaciones pertinentes, la guía recomienda la identificación del fabricante, los peligros que el producto puede generar, las medidas de seguridad en caso de una emergencia o accidente (teléfonos de contacto y recomedaciones médicas), la formulación, la composición y la concentración del producto, así como la fecha de vencimiento, entre las principales sugerencias.

 

La hoja de seguridad de los productos fitosanitarios posee una información útil para el productor u operador. Este documento acompaña a cada uno de los plaguicidas y es desarrollado directamente por fabricantes, que son los conocedores de todos los componentes químicos del producto.

 

A diferencia de la etiqueta, la hoja de seguridad incluye una información más específica y extensa sobre la composición, peligros y acciones a considerar en caso de emergencias.

 

Al momento de comprar y almacenar plaguicidas o fitosanitarios se recomienda la compra solamente de un producto original y correspondiente a vendedores autorizados.

 

Estos productos se deben comprar de acuerdo con las necesidades del productor para reducir tiempo de almacenamiento y excedentes. Es importante también que cumpla con todas las legislaciones locales concernientes al almacenamiento.

 

Los plaguicidas deben ser almacenados de forma segura, bajo llave, fuera del alcance de niños, personas no autorizadas y animales. El lugar de almacenamiento debe ser seco y contar con una buena ventilación.

 

En caso de que el producto se derrame, se debe seguir las instrucciones de la etiqueta para su limpieza y adecuada disposición.

 

“No permitas que un plaguicida vencido afecte tu producción agrícola, antes de usar un producto verifica su caducidad para garantizar su eficiencia y proteger los cultivos de ataque de plagas o enfermedades”, puntualiza el informe de CropLife Latin America.

 

[Fuente: CropLife Latin America]