Los productores trigueros del sur del país tenían la intención de adelantar la siembra del cereal, con el objetivo de entrar con una soja más temprana en la siguiente campaña, y si bien la implantación arrancó hace un mes, no pasa del 30 % de avance por falta de humedad, ya que se registran más de 25 días sin lluvias, expresó a Productiva Jorge Pleva, productor de Capitán Miranda y miembro directivo de la Coordinadora Agrícola del Paraguay CAP, filial Itapúa.
Pleiva enfatizó que hay una merma importante de trigo en las zonas productoras, principalmente porque el precio no cubre la expectativa del agricultor, pero resaltó que, en su caso particular, como productor que se autodefine triguero, volverá a plantar el 100 % de su superficie agrícola con este grano, pese a todas las vicisitudes.
Explicó que aunque que el productor está consciente del riesgo que representa la helada para una siembra adelantada del trigo, como nunca se está jugando por esta decisión, ya que la movida obedece, principalmente, a la intención de arrancar la implantación de soja de la zafra venidera lo más temprano posible, teniendo en cuenta de que en Itapúa los mejores resultados en las últimas campañas se han logrado con los cultivos más tempraneros de la oleaginosa.
“Yo estoy más hacia Encarnación, Capitán Miranda, Nueva Alborada, Fram, La Paz, parte de Hohenau, Bella Vista, todas estas zonas fuimos afectadas por la seca y tuvimos muy bajos rendimientos; los que hicieron sojas tempraneras sacaron buenas cosechas, entonces, la gente quería plantar temprano”, manifestó.
Este plan, lastimosamente, no se está pudiendo llevar a cabalidad por la falta de humedad. Si bien la siembra arrancó a finales de marzo en el sur del país, muchos productores se vieron obligados a paralizar el trabajo hasta que lleguen las precipitaciones. Actualmente, la implantación avanza entre un 30 % y 35 %, señaló el gremialista.
“Ahora estamos esperando lluvia, desde hace 25 días no tenemos lluvia acá en la zona de Itapúa”, acotó y agregó la necesidad de las precipitaciones para que las parcelas sembradas puedan desarrollarse porque actualmente están germinando de forma despareja, lo cual va a representar también un problema en el momento de la cosecha.
Enfatizó que muchos productores que sembraban trigo en campañas anteriores, este año decidieron probar otros rubros como el maíz, pero, lastimosamente, la falta de lluvia está castigando a los cultivos. “Las últimas lluvias fueron lluvias muy desparejas”, acotó.
Expresó que muchos productores están realizando cultivos de cobertura; en ese sentido, resaltó que sobre el mileto se puede plantar un trigo más tardío. “Hay otra gente que está haciendo avena, algo de canola, se está volviendo hacer la canola, un tiempo se dejó, porque cuando madura y viene una lluvia o un granizo desgrana todo, la gente se estira para un lado y a veces no le pegamos otra vez”, expresó el productor, al momento de describir las distintas variables que debe manejar el trabajador de campo.
Pleva se autodefinió como un productor triguero y pese a todas las vicisitudes que enfrenta en cada campaña, ya sean climáticas, agronómicas o de mercados, aseguró que volverá a plantar en la totalidad de su área agrícola, consciente de que cada vez más agricultores están saliendo del rubro, principalmente porque el precio del trigo no cubre la expectativa del productor, que llega a empatar si cosecha 2000 kg por hectárea. “Estoy viendo que hay una merma impresionando de trigo en la zona de colonias unidas”, lamentó.
Agregó que este año tienen un problema con la presencia de un gorgojo nuevo que está apareciendo y atacando principalmente las semillas en el depósito. “Nosotros tratamos la semilla, guardamos y ahora hace 15 a 20 días nos dimos cuenta de que está atacando esa plaga, tal vez por eso también la gente se apura un poquito más para meter la semilla en la tierra, ese bichito tritura el trigo”, afirmó.
Pleva mencionó que sembrará el 100 % de su área agrícola con trigo, ya que cuenta con semillas, pero resaltó que podría disminuir la inversión en abono, debido a la incertidumbre climática y de mercado. “Si yo dejo mi parcela a esperar la soja, si no hago trigo, se me ensucia mucho, entonces hago trigo, si saco algo bien y si no saco, termina mi parcela limpia. Nosotros jugamos a la lotería con la producción, con todos los cultivos”, aseguró.
Recordó que en la campaña 2022/2023 vino una enfermedad porque en esa temporada no hizo suficiente frío y eso afectó a todos los trigales del país, que tuvieron rendimientos muy bajos, lo que les desalentó a los productores. “Entonces, el año pasado nos tiramos a variedades brasileras, antes eran variedades nacionales, las variedades brasileras resistieron mejor la campaña antepasada por el clima que ellos manejan allí, y ahora casi todos estamos usando variedades brasileras”, explicó y agregó que en su caso particular en la campaña anterior la producción en volumen no fue buena, pues llegó a 2800 kg/ha, pero la calidad fue de primera.
[Foto: siembra de trigo / Gentileza Jorge Pleva]