De acuerdo con el mapeamiento de nematodos realizado a nivel país por Syngenta Paraguay, entre el 2023 y este año se levantaron 600 puntos de muestreo en todas las localidades, cuyo análisis posterior arrojó una distribución uniforme de nematodos fitoparásitos en todos los puntos mostrados, independientemente de las condiciones climáticas, lo que, finalmente, da la pauta del nivel de esta problemática y desemboca en la necesidad de empezar a trabajar para tratar de contenerlos no solo en el país, sino a nivel regional, resaltó en Nación Productiva, Eduardo Rodríguez, responsable de Investigación y Desarrollo de la empresa para Paraguay y Bolivia. Acotó, además, que la incidencia del género Pratylenchus representa el 80 % de esas muestras.
«Nosotros habíamos encontrado una distribución bastante homogénea de nematodos fitoparásitos que son realmente los que generan daños al cultivo de soja y otros. Este trabajo fue realizado durante el periodo de desarrollo y cultivo de las hojas, aproximadamente 40 a 60 días germinada la soja, esto tratando de dar una coincidencia con el pico de reproducción de nematodos», sostuvo Rodríguez.
En ese sentido, resaltó que donde fueron ejecutados los trabajos de monitoreo encontraron una media aproximada de 5 a 6 géneros de nematodos fitoparásitos muy importantes, donde aparece Pratylenchus, género común en regiones productoras en un alto porcentaje del 80 % de 600 muestras evaluadas.
Asimismo, se encontró en segundo lugar al Helicotylenchus, en tercer lugar a Meloidogyne sp, y en cuarto lugar al género Heterodera glycines. En este caso, sostuvo que si bien el país aún no tiene un porcentaje de presencia importante, si se toma de referencia el primer reporte en 2018, al menos a la fecha se encuentra un salto del 10 % en cuanto a apariciones en estas muestras. Es decir, precisó que todos los nematodos que en su momento fueron detectados hoy en día están en un porcentaje mayor en todas las zonas productivas del país.
En ese contexto, destacó la utilización de la nueva tecnología Tymirium, que posee dos facetas, como, por ejemplo, ser un nematicida de amplio espectro, ya que permite el control de varios géneros en comparación con otros productos que solo se enfocan en uno o dos como máximo. Por otra parte, también es un fungicida que tiene control sobre las enfermedades causadas por hongos de suelo.
«Nosotros tomamos aproximadamente un periodo de 15 años para el desarrollo de esta tecnología, partiendo de una cantidad aproximada de 300 compuestos que fueron seleccionándose a través de los años, mediante ensayos de laboratorios bajo condiciones controladas y de campo para finalmente llegar a un activo, a una molécula que justamente es el Tymirium. Entonces, es una tecnología bastante completa tanto para la semilla como para el suelo», finalizó Rodríguez.
[Foto: (de izq. a der.) Eduardo Rodríguez, Marcos Martínez e Ysrael Machado, de Syngenta Paraguay / Nación Productiva]