En esta primera mitad del año persiste la tendencia negativa de las exportaciones de harina de soja, ya que vienen registrando bajas tanto en volumen como en la cotización y, por ende, en el valor generado, a diferencia del otro derivado, el aceite, cuyo precio se mantiene hacia arriba y en aumento. Hasta junio el valor por tonelada de la harina registró una caída de 19 % en comparación con el mismo periodo de 2024, una reducción del 22 % en divisas y de 4 % en cantidad enviada, de acuerdo con los datos analizados del Banco Central del Paraguay (BCP).
De enero a junio de este año el precio promedio de exportación de la harina de soja cerró en USD 296 la tonelada, que significa una variación negativa de 19 % (USD 68 menos), ya que en los primeros seis meses del 2024 el valor medio se ubicó en USD 364 la tonelada.
Esta tendencia negativa de la cotización de este subproducto se viene observando desde el inicio del año, en contraste con el aceite de soja, cuyo precio viene aumentando. Y es así que en el primer semestre registró un incremento del 20 % o USD 158 más que el mismo periodo del 2024. Esto también impulsa el ingreso de divisas, que tuvo una suba de 22 % hasta junio.
En cuanto a volumen, Paraguay exportó 1 003 494 toneladas de harina de soja, es decir, 41 595 toneladas menos (4 %) que el primer semestre de 2024, cuando fueron embarcadas 1 045 090 toneladas.
El menor precio, sumado a la disminución del volumen embarcado, repercutieron en el ingreso de divisas, que registró una caída del 22 %. De enero a junio los envíos de este derivado generaron USD 296.6 millones, una diferencia negativa de USD 83.4 millones, en comparación con los USD 380 millones ingresados al cierre del primer semestre del año pasado.