El programa South American Regenerative Agriculture (SARA), un proyecto diseñado para que los ganaderos de Argentina, Uruguay, Chile y Paraguay pasen de un manejo convencional a la ganadería regenerativa mediante un incentivo económico que se alcanza al secuestrar CO₂, podría emitir en este 2025 los primeros créditos de carbono. En nuestro país, la empresa De Raiz es la que lleva la representación de este proyecto y al respecto, su socio-director, Alejandro Llano, comentó a Productiva que están trabajando con 15 campos que actualmente están en la etapa de verificación y auditoría y que probablemente este año haya novedades.
“Nosotros estamos trabajando con 15 campos que se vienen midiendo año a año en su desempeño ecosistémico y biológico, y cómo vienen esos indicadores que, finalmente, después eso se traduce en incentivos. Es una cuestión de tener paciencia, pero estamos en carrera, así que en el horizonte de corto, mediano y largo plazo vemos que nos va a ser altamente competitivos en todos los niveles”, indicó.
Llano aclaró que hay cosas que escapan del control como son los organismos internacionales, que son los entes verificadores, pero que siempre hablan con los productores locales que hay que concentrarse en lo que sí se puede controlar desde aquí.
“Siempre hablamos con los productores con los que estamos trabajando, nosotros debemos concentrarnos en los factores intrínsecos, tranqueras para adentro, cuáles son los factores, las variables que nosotros controlamos y es ahí donde todo este paquete tecnológico de planificación nos ayuda a mejorar nuestro negocio primario, mientras estamos participando de esta búsqueda de incentivos que nos conectan con el mundo”, expresó.
Destacó que Paraguay está participando en un programa que se puede traducir en un incentivo económico para el productor, que puede significar un ingreso adicional, extraordinario, que se logra desarrollando la infraestructura acorde al potencial natural del campo.
El programa SARA, que opera actualmente en Argentina, Uruguay, Chile y Paraguay, busca incentivar y promover la implementación de la ganadería regenerativa con base en el manejo holístico. Por medio de esta iniciativa el productor interesado se compromete con la regeneración de su campo.
Aquí se mide el desempeño ecológico del campo y el manejo de la ganadería dentro de los procesos ecosistémicos (ciclo del agua, ciclo de minerales, flujo de la energía y dinámica en las comunidades).
El programa SARA consta de dos procedimientos: la planificación del pastoreo y un monitoreo ambiental con un protocolo estandarizado que es reconocido dentro de la comunidad científica a nivel internacional, expresó Llano.
En ese sentido, indicó que en Paraguay este proyecto abarca más de 80 000 hectáreas de la región Oriental y el Chaco.
[Foto : Alejandro Llano, socio-director de la empresa De Raiz / Archivo / Nación Productiva]