En comparación con las proyecciones de 13,6 millones de toneladas previstas para el cierre de este año, los envíos mundiales de carne aviar podrían incrementarse 4 % en 2023 hasta llegar a 14,1 millones de toneladas, lo que significaría un récord en el comercio avícola mundial, según el informe de octubre del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA).
En 2023 el comercio mundial de carne de pollo tendría el crecimiento más agresivo registrado desde antes del Covid-19. Según estimaciones del USDA, se prevén exportaciones de 14,1 millones de toneladas de la proteína animal, un aumento de 4 %, respecto a los 13,6 millones de toneladas calculados para el cierre de este año.
Para el próximo año se espera que los principales exportadores de carne aviar sean Brasil, Estados Unidos, la Unión Europea (UE), Tailandia, Turquía, China, Ucrania, Reino Unido, Rusia, Argentina, Bielorrusia, etc.
El organismo internacional refiere que la expansión se ve impulsada principalmente por una mayor demanda en China, la UE y Arabia Saudita. Además, indica que dado que el crecimiento de la producción es limitado para varios productores exportadores competidores, se espera que Brasil capte la mayor parte de las ganancias.
La competitividad de precios de Brasil, el acceso al mercado de la UE y la capacidad de suministrar productos halal -conjunto de prácticas permitidas por la religión musulmana relacionado con el tratamiento de los alimentos de origen animal- hacen que Brasil se encuentre bien posicionado para satisfacer la creciente demanda global, señala el USDA.
Por otro lado, los envíos de Tailandia alcanzarán un récord de 1 millón de toneladas de carne aviar y se registrarían mayores exportaciones a los principales mercados, beneficiándose particularmente de la mejora de China y Arabia Saudita.
Finalmente, se estima que las exportaciones de la UE se vean obstaculizadas por el débil crecimiento de la producción por las repercusiones de la Influenza aviar de alta patogenicidad (IAAP) y el alto precio derivado del aumento de los costes de los insumos, en particular de la energía.