En lo que va del año, los créditos bancarios para el segmento sojero representan 46,76 % del total de emisiones, lo que implica, en términos interanuales, una disminución de 1,7 puntos porcentuales, según el boletín de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), basado en datos del Banco Central del Paraguay (BCP). En tanto que a febrero la refinanciación de préstamos tuvo un crecimiento de 18 %, debido al clima desfavorable que se tuvo desde el comienzo de la cosecha, lo que genera un ambiente preocupante, sobre todo para el pequeño productor.

 

José Berea, presidente de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco) y vicepresidente de la UGP, explicó que el endeudamiento surge a partir de la pérdida de granos y de la diferencia de precios en la primera parte de la cosecha.

 

“El sector sojero está perdiendo este año entre USD 700 y 800 millones a causa de la discrepancia de precios y la merma en la producción”, indicó.

 

Asimismo, la apreciación del dólar estadounidense también fue otro factor con mayor incidencia en el repunte del saldo de la deuda negociada por clientes en entidades del sector.

 

La mala cosecha se debe, principalmente, a la sequía que hubo en el país, lo que dificultó la cancelación de créditos que realizaron los productores para esta siembra; en otras palabras, tendrán que pagar sus préstamos, de este periodo y del siguiente, únicamente con la producción de la próxima cosecha, precisó Berea.

 

Es sí que el agricultor deberá solicitar nuevos créditos de mayor monto, aun debiendo la cantidad inicial y los cargos por la refinanciación, lo que repercutirá negativamente en la capacidad de invertir, ocasionando, incluso, que entre en mora.

 

“Se están manejando herramientas para poder refinanciar. La recuperación llevará entre uno y tres años, dependiendo de cada caso. Con cada cosecha pagarán todas las deudas como lo hacían años atrás”, concluyó Berea.

 

[Fuente: Boletín informativo de la Unión de Gremios de la Producción]