Los precios de la soja sumaron ayer su cuarta rueda alcista consecutiva en Chicago por la expectativa en torno a una cosecha estadounidense que sería menor a las últimas previsiones hechas por el USDA, destaca el análisis de Granar. Es así que los contratos de setiembre y noviembre de la oleaginosa cerraron en USD 512,67 y USD 516,52, respectivamente.

 

La posición de setiembre en Chicago registró ayer un aumento de USD 5,24 respecto al viernes de la semana pasada, mientras que la de noviembre, un incremento de USD 6,61.

 

El viernes pasado ProFarmer estimó la cosecha estadounidense en 111,86 millones de toneladas, en función de un rinde promedio nacional de 33,42 quintales por hectárea. Esto es, por debajo de los 114,45 millones y de los 34,23 quintales previstos por el USDA en su último informe mensual.

 

A este panorama dejado por la gira anual de cultivos se agregaron durante el fin de semana temperaturas muy elevadas en zonas claves del cinturón sojero/maicero y la ausencia de nuevas lluvias, dos condiciones que podrían provocar pérdidas adicionales en las regiones donde todavía los cultivos están definiendo el potencial de rindes.

 

MAÍZ. Con valores en alza cerró ayer el maíz en Chicago tras las bajas de la semana anterior. El repunte, que en parte fue técnico, tuvo entre sus fundamentos los datos aportados el viernes, luego del cierre del mercado, por ProFarmer, que estimó la cosecha estadounidense en 380 millones de toneladas, en virtud de un rinde promedio nacional de 107,96 quintales por hectárea. Ambas cifras fueron inferiores a las publicadas por el USDA en su último informe mensual, con 383,83 millones de toneladas y con 109,90 quintales. Más allá del ajuste, Granar considera que el volumen calculado continúa siendo muy abundante y elevará las existencias finales hasta el mayor nivel en cuatro años.

 

Así, los contratos de setiembre y diciembre cerraron en USD 188,38 y USD 195,36, respectivamente. Es decir, un incremento de USD 3,05 y USD 3,24 en las respectivas posiciones.

 

TRIGO. Los precios del trigo cerraron en baja en Estados Unidos como respuesta a un mercado global bien abastecido, con la cosecha de la Unión Europea casi finalizada y con la recolección de Rusia en progreso, con rindes más elevados que los esperados, que darían como resultado la segunda mayor cosecha histórica para el principal exportador mundial del grano fino.

 

En ese escenario, también aportó a la tónica bajista la segunda salida de un barco desde el puerto de Odesa, en Ucrania, por el corredor humanitario anunciado semanas atrás. Si bien ese buque no trasporta granos, el hecho en sí mismo es una demostración de la posibilidad de volver a usar el mar Negro para mover mercaderías, luego de la caída del acuerdo de granos por el retiro de Rusia.

 

Y sobre esto último, el mercado está atento a la chance de que en la reunión presencial que se daría en los próximos días entre los presidentes de Rusia y de Turquía se llegue a algún entendimiento para revivir el acuerdo de granos.

 

Los precios del trigo en los contratos de setiembre y diciembre finalizaron en USD 216,05 y USD 226,71, respectivamente, lo que implica una reducción de USD 1,93 y USD 1,74, respecto al viernes de la semana pasada.