¿Qué es la inseminación artificial? ¿Cuáles son sus ventajas y desventajas? ¿Quién puede realizar este servicio? De todo esto hablaremos a continuación.

 

La historia de la inseminación artificial
Según antiguos relatos, en el año de 1332 d.C, el jefe de una aldea en Arabia colectó semen de un animal de una aldea rival, el mejor animal, y lo introdujo en una de sus yeguas, también la mejor. La fecundación resultó en un potrillo con características muy similares a las del padre.

 

Se observan estudios desde el siglo XVII, pero solamente en el año 1912, el científico Elias Ivanov pudo demostrar la posibilidad de fecundación por métodos artificiales, cuando comprobó 31 fecundaciones a partir de 39 yeguas inseminadas. Ya en los años 1938, según datos comprobatorios estadísticos, más de 50 millones de hembras bovinas habían sido sometidas a fecundación por inseminación artificial hasta ese momento. En el año 1942, en Inglaterra surge el primer centro de inseminación artificial.

 

La inseminación artificial en Paraguay fue introducida a través del Servicio Técnico Interamericano de Cooperación Agrícola (STICA) en el año 1953.

 

¿Qué es la inseminación artificial en bovinos, y quién la realiza?
La inseminación artificial en bovinos es una técnica por medio de la cual el semen es depositado artificialmente en el útero de la hembra, esperando una futura preñez y mejoría genética. La técnica de inseminación artificial, está bien difundida en todo el mundo y hoy existen capacitaciones para que el mismo productor pueda realizar este procedimiento.

 

Es así que la técnica de inseminación artificial en bovinos es un procedimiento rutinario en muchos tambos lecheros realizado por las propias personas que ahí trabajan.

 

¿Cuáles son las ventajas de la inseminación artificial en bovinos y cuáles son los problemas que afectan las tasas de preñez del rodeo?
Una de las mayores ventajas es la utilización de toros comprobadamente mejores genéticamente, que transmiten sus características a sus descendientes. Con las técnicas actuales de conservación y manipuleo del semen se puede adquirir pajuelas muy fácilmente, incluso de animales que están en otros países.

 

Además, hay un menor riesgo de diseminación de enfermedades reproductivas, menor costo (es mucho más barato tener pajuelas congeladas, que mantener un toro).

 

Pero la mayor ventaja de trabajar con inseminación artificial está a largo plazo, ya que la herencia genética y la uniformidad del plantel, según los propios productores de leche, es una herramienta muy ventajosa en el tambo.

 

Como problemas se pueden citar: la identificación de celo y óptimo momento para realizar la inseminación, mala conservación y mala utilización de las pajuelas y equipos, problemas relacionados con manejo nutricional y manejo sanitario.

 

Todo eso hace que las tasas de preñez sean bajas, lo que ocasiona, en algunos casos, que la gente deje de utilizar la inseminación artificial y vuelva a la monta natural.

 

Como una observación, en muchos tambos lecheros se utilizan animales para repase en hembras que no logran preñarse con la inseminación artificial. En otros casos, hay productores que no usan la IA, sino toros considerados por ellos como animales de buena genética, pero sin comprobación, si se los compara con toros oriundos de centros genéticos.

 

Para finalizar
Mi pensamiento, acá expuesto en pocas palabras, basado en los años de trabajo en tambos lecheros, nos muestra que la técnica de inseminación artificial bien utilizada como la evolución genética de los toros, es una gran herramienta en la producción lechera, tanto en mejoría de los animales como en mejoría en la calidad de la leche producida.

 

Por último, les digo que sigan utilizando la inseminación artificial, pues ella les dará muchos logros futuros. Y a quien no utiliza la técnica, que busque toros comprobados para mayor seguridad y mejores logros.

 

[Material publicado en el segmento Ganadería Productiva de la edición Nº 85 de noviembre de Revista Productiva, páginas 18]
[Foto icon-camera : Revista Productiva]