La compañía global Bayer acordó la compra del germoplasma y la propiedad intelectual de una empresa canadiense sobre las semillas de camelina, una oleaginosa utilizada como materia prima para los biocombustibles avanzados, como el de aviación sostenible (SAF) y el diésel renovable (HVO).

 

Con el objetivo de impulsar el desarrollo del mercado de biocombustibles, la multinacional alemana Bayer adquirió los activos de la camelina de una empresa de Canadá. El valor del acuerdo aún no fue revelado.

 

La camelina es una oleaginosa que se puede plantar tanto en primavera como en invierno en diferentes regiones del mundo y es semiperenne. Su uso es considerado por el Plan de Compensación y Reducción de Carbono para la Aviación Internacional (Corsia) como una de las posibles materias primas para la producción de biocombustibles avanzados a través de la ruta del aceite vegetal (HEFA).

 

Según Corsia, la huella de emisiones de la camelina es de 28,6 gramos de carbono equivalente por megajulio de energía generada.

 

Por su parte, Jennifer Ozimkiewicz, jefa de Estrategia de Cultivo de Soja y Biocombustibles en la división de Ciencia de Cultivos de Bayer, puntualizó que: “la camelina es un cultivo de corta duración y tolerante a la sequía que ofrece a los productores una alternativa de cultivo de bajos insumos para tierras marginales o tierras que se pueden cultivar fuera de temporada”.

 

Se resalta, además, que la camelina es objeto de interés por parte de importantes jugadores de la agroindustria. En 2023, Bunge y Chevron compraron una empresa argentina enfocada en este cultivo, a fin de satisfacer la demanda de materias primas para los nuevos biocombustibles.

 

La camelina no es el único cultivo que Bayer pretende desarrollar en este segmento, ya que en un comunicado la compañía señaló que el 2025 será un año para establecer nuevas cadenas de suministro de combustibles renovables, con el objetivo de entregar carburantes con baja intensidad de carbono en comparación con los tradicionales.

 

En este sentido, la multinacional alemana opera desde 2022 en el cultivo CoverCree, un cultivo de cobertura oleaginosa de invierno que captura carbono en el suelo.

 

Además, la semana pasada la firma anunció una asociación con el gigante noruego del combustible Neste para aumentar la escala de producción de canola, lo que debería resultar en un nuevo híbrido del cultivo en 2027.

 

[Fuente: Brasil Agro]

[Foto icon-camera : Clarín Argentina]