La ratificación del Gobierno de Alberto Fernández de su interés de aumentar las retenciones a la soja argentina de 30 % al 33 % ha provocado un descontento dentro del sector productivo del vecino país, que alega no poder pagar más impuestos, publica el diario La Nación de Argentina.

 

Ya en diciembre del 2019 se concretó una suba de las retenciones de los productos agroindustriales, por lo que el impuesto a la soja pasó del 24,5 % al 30 %. Es por ello que ante la intención de un nuevo incremento, desde el campo le respondieron que no pueden pagar un peso más de impuestos, según la publicación del medio impreso.

 

Durante su discurso de apertura de sesiones ordinarias ante el Congreso, Fernández señaló que el crecimiento del campo es «uno de los objetivos» de su Gobierno y añadió que se ocupó de que los productores «tengan un más fácil acceso al crédito» y se cuidó el precio de los combustibles.

 

Inmediatamente, en cuanto al incremento de las retenciones, el mandatario mencionó: «Partiendo de allí, y queriendo preservar el mejor desarrollo del campo, hemos hecho una propuesta generosa en materia de derechos a las exportaciones en la que solo se incrementa uno de un total de veinticinco cultivos que hoy están afectados por esos derechos«.

 

Luis Basterra, ministro de Agricultura de Argentina, comentó que el jueves pasado expuso esta decisión a la Mesa de Enlace y el martes de esta semana recibirá nuevamente a los ruralistas para darles a conocer la respuesta del Gobierno ante el pedido de rebaja de las retenciones hecho por el sector.

 

En su discurso Fernández no hizo ninguna mención de una posible rebaja. Solo realizó una alusión indirecta al conflicto de 2008 por las retenciones móviles, que lo tuvo como protagonista en la negociación con el campo cuando era jefe de Gabinete. «Aspiro a que esta vez, a través del diálogo, encontremos el camino que nos conduzca a sostener el desarrollo y a preservar las cuentas públicas«, manifestó.

 

Desde la Mesa de Enlace, en la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (Coninagro) mencionaron que no van a opinar hasta conocer este martes, con Basterra, el contenido de las medidas.

 

Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), criticó el posible aumento de las retenciones. «Nosotros seguimos sosteniendo la imposibilidad de incrementar cualquier porcentaje las retenciones y lo vamos a seguir sosteniendo«, aseveró a la Nación.

 

Chemes resaltó también: «Sostenemos la imposibilidad de pagar un peso más de impuestos. Esa es la postura de la CRA«. En el campo recuerdan que vienen «poniendo el hombro» con más de USD 100 000 millones por retenciones desde 2002, además de otros tributos.

 

A través de su cuenta de Twitter, el presidente de la CRA declaró: “La propuesta del Gobierno no es generosa. Alienta la puerta giratoria en la que el campo pone cada vez más, pero el gasto público crece y la pobreza nunca baja. Los productores están atrapados en la voracidad de los gobiernos que nos exigen pagar lo que ya no tenemos«.

 

Asimismo, Carlos Achetoni, presidente de Federación Agraria Argentina (FAA), destacó: «Vamos a esperar al martes, pero los pequeños y medianos productores no podemos hacer más esfuerzos y, por el contrario, necesitamos un trato diferenciado. Se habla mucho de segmentación, pero no hemos visto propuesta aún de parte del Gobierno«.

 

Otro de los rechazos a este posible aumento provino de la Sociedad Rural Argentina. Daniel Pelegrina, presidente de este gremio, expresó su desaprobación a la suba de las retenciones e indicó que el anuncio «le resta importancia» al encuentro con Basterra.

 

«Hoy mismo escuchamos cómo en medio de un diálogo abierto el presidente de la Nación anunció un aumento de retenciones a la soja. Nos sorprendió porque la consigna que el ministro trajo el jueves pasado luego de más de dos meses esperando la convocatoria, era darnos una respuesta a los pedidos que hicimos desde la Comisión de Enlace, indicando lo perjudicial que era tomar esa medida”, acotó.

 

Pelegrina precisó que “este anuncio le resta importancia a la reunión pactada, y se parece más a las prácticas a la que nos tenían acostumbrados cuando no había diálogo en el pasado”.

 

En tanto, Matías de Velazco, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), también criticó cualquier suba de las retenciones. «En la mochila que lleva el campo no le cabe un gramo más de impuestos. Si hay que preservar el equilibrio de las cuentas del Estado, ¿por qué no prueban con algo novedoso que no se hizo nunca en la Argentina como bajar el gasto del Estado?», resaltó.

 

Recalcó que “es hora de que los políticos también sean solidarios y cedan algo de sus excesivos gastos. El campo siempre fue solidario dados los miles de millones de dólares aportados tomando solo las retenciones. Creo que va llegando la hora de ver el esfuerzo de los gobernantes«.

 

Desde la Carbap indican que se encuentran en estado de alerta y movilización y quieren que la Mesa de Enlace le ponga fecha a un cese de comercialización ante el inminente incremento de las retenciones.

 

El Gobierno de Fernández reabrió el viernes pasado parte del registro para exportar, que había cerrado ante la posible suba de las retenciones a la soja, pero sigue suspendido para trigo, maíz, girasol, soja y arroz, entre otros productos, que concentran el 95 % de las exportaciones de granos.

 

Desde el sector de la exportación indican que así siguen paralizadas el 95 % de las ventas al exterior y solo esta semana, de continuar cerrado el registro, se perderían ventas por USD 180 millones.

 

Al respecto, señalan que «se están generando perjuicios económicos a exportadores sin justificación técnica alguna. Hay previstos más de 10 barcos para cargar maíz, harina de soja y aceite de soja sin autorizaciones de exportación por un valor cercano a los 180 millones de dólares. Si no salen, la Argentina entrará en la lista negra de países defaulteadores de contratos internacionales”.

 

Un grupo de productores argentinos se convocó ayer en el km 153 de la ruta 9, en San Pedro, a la espera del discurso de Fernández. Asistieron de diversas localidades de la región.

 

Además, pidieron a la Mesa de Enlace, si sale la suba de las retenciones, un cese de comercialización por 15 días. Los productores consideraron también que debe hacerse una «rebelión fiscal con suspensión de pago de impuestos«.

 

[Fuente: La Nación Argentina]