El Ing. Agr. Fabián Pereira, director comercial de GPSA, habló con Revista Productiva sobre cómo tratar de sobrellevar esta situación ocasionada por la pandemia del coronavirus. Además, se refirió a la sequía en el Chaco, al emprendimiento con visión social que desarrollan como empresa y a los grandes desafíos que afronta la agricultura nacional.

 

“Pensá en positivo”. ¿En qué consiste esta campaña que llevarán adelante?
Estamos pasando por una situación complicada en donde a diario vemos noticias negativas, de gente enferma, de gente fallecida, pero, en general, en nuestro país estamos viendo que pese a las limitaciones se están haciendo bien las cosas. Dentro del marco de la situación, nosotros queremos destacar varios factores que se hacen en Paraguay para tratar de pensar en positivo. Y es aquí en donde el campo tiene preponderancia, porque seguimos produciendo alimentos, porque seguimos atendiendo el mercado, porque el campo no para, a pesar de la difícil situación. Queremos trasmitir esto constantemente para que la gente también vaya sumando mayor optimismo para lo que se viene en el futuro.

Nosotros queremos destacar varios factores que se hacen en Paraguay para tratar de pensar en positivo

¿Cómo van a encarar esta campaña?
Bueno, la campaña se enfoca en buscar informaciones positivas y destacarlas. Hoy, cuando terminamos la zafra vemos que los precios de la soja están deprimidos, pero venimos de obtener rendimientos elevados y eso debemos rescatarlo. El maíz pasa por la misma situación, pero sabemos que es un rubro importante dentro de la cadena de valor para el sector agrícola paraguayo. Si bien estos dos rubros están afrontando situaciones difíciles, vemos cómo el trigo y el arroz están pasando por proyecciones interesantes. El arroz tuvo tal vez uno de sus mejores años en materia de productividad y ahora, sumado a mejores precios, está generando un impacto positivo en el sector y en el país. El trigo tiene inmejorables oportunidades de tener una mayor salida, ya que Brasil aumentará su demanda y su principal proveedor, Argentina, probablemente reducirá ostensiblemente su disponibilidad. Eso representa una oportunidad y debemos utilizarla como factor de motivación para el segmento productivo y para toda la economía nacional.

El arroz tuvo tal vez uno de sus mejores años en materia de productividad y ahora, sumado a mejores precios, está generando un impacto positivo en el sector y en el país

Con relación al arroz, ¿cómo terminó la zafra en la Estancia 7 Puntas?
En cuanto al cultivo de arroz desarrollado en la Estancia 7 Puntas, en Pozo Colorado, sobre la cuenca del río Paraguay, logramos un promedio de rendimiento de 10 500 kg por hectárea, que significa 8500 kg limpio y seco. Es un volumen significativo que motiva a seguir con el emprendimiento en una región que necesita desarrollo.

 

Cuando arrancaron hace tres años, ¿pensaron que tendrían estos resultados?
Estos campos eran palmares que albergaban una ganadería tradicional. Con esa actividad era imposible financiar una inversión en caminos, infraestructura y desarrollo de los campos bajos; sin embargo, al integrar el arroz dentro de la actividad, se logró generar recursos para mejorar la condición del suelo para la agricultura y, en consecuencia, también para la ganadería, que se beneficia de los rastrojos de arroz, mediante un consorcio agrícola-pecuario desarrollado con eficiencia. A partir de ahora el objetivo es apuntar a generar un valor agregado de esa materia prima, mediante la instalación de un molino en las campañas siguientes. Creo que hemos logrado los objetivos trazados hasta el momento.

 

¿Podemos pensar en tener un impacto en Pozo Colorado con el arroz, así como sucedió en Misiones en su momento?

Esto recién empieza. Creo que a diferencia de otras regiones, en el Chaco las cosas tardan más en consolidarse porque nunca un año es similar al otro, porque la tecnología debe ser probada una y otra vez y eso creo que demandará mucho tiempo, pero creo que pensar en que el arroz puede ayudar a reactivar la zona es probable con el correr del tiempo.

A diferencia de otras regiones, en el Chaco las cosas tardan más en consolidarse porque nunca un año es similar al otro

En relación con el avance de la soja en el Chaco, ¿qué resultados están registrando en la producción de semillas?
Esta severa sequía debe ser una de las peores de los últimos 50 o 70 años. Nosotros estábamos trabajando con cooperadores del Chaco para desarrollar planes semilleros de alta calidad, pero, lastimosamente, por las condiciones se perdieron en un 100 % esas parcelas. Eso nos duele, pero así como dije, el Chaco tiene estas cosas que no nos deja de sorprender, pero estamos seguros del potencial que tiene, así que debemos seguir trabajando.

Esta severa sequía debe ser una de las peores de los últimos 50 o 70 años

Ustedes habían asistido a algunos productores del Chaco en parcelas comerciales. ¿Qué resultados están alcanzando en esta zafra?

Nosotros veníamos acompañando a los productores de soja en la región del Chaco, en la zona de Mariscal Estigarribia. Ellos tuvieron óptimos resultados en la campaña anterior, con promedios de 2500 y 2800 kg por hectárea, pero en esta zafra están viendo una pérdida total de la producción de la oleaginosa a causa de los varios meses sin lluvias. Pero debemos considerar también que teniendo en cuenta que el costo de producción de soja en el Chaco es menor en relación con la región Oriental, los productores afectados compensarán los buenos resultados del año pasado con este en el que tuvieron fuertes pérdidas; es decir, si el año pasado tuvieron una renta de USD 300 por hectárea, al promediar los resultados de ambas campañas, esa ganancia se reduce a USD 150 por hectárea. La soja en el Chaco tiene un potencial enorme, pero tiene estas situaciones que golpean, por eso es importante que podamos elaborar planes a cinco años, porque en ese periodo puede haber años buenos y malos, para luego promediar las ganancias y las pérdidas.

Lastimosamente, por las condiciones se perdieron en un 100 % esas parcelas

¿Cuál es la experiencia que lograron rescatar del otro programa que tiene la empresa, el de Paso Kurusu?
Comenzamos a desarrollar en forma positiva el proyecto Paso Kurusu entre los departamentos de San Pedro y Amambay, en donde estamos asistiendo a pequeños productores que anteriormente carecían de oportunidades y acceso a tecnología. Mediante el acompañamiento, la empresa está asistiéndolos con semillas, insumos y acopio de los granos de soja que producen. Es un trabajo que estamos desarrollando para apoyar a estos compatriotas que quieren trabajar, pero que no han tenido la oportunidad de hacerlo. Sabemos que en Paraguay tenemos otras urgencias, por ende, esa ayuda no llega como ellos requieren. Nosotros venimos asistiéndoles con tecnología, capacitación y han tenido su primera cosecha en esta campaña con buenos números finales, pero hace falta mejorar el suelo, porque provienen de pasturas nativas empobrecidas y ahora estamos corrigiendo con agricultura de precisión, para que pueda mejorar la productividad en estas fincas. Esta gente nunca tuvo asistencia, por eso nosotros buscamos ayudarles a obtener una mejor condición de vida mediante la agricultura. Por otra parte, la situación ocasionada por la pandemia también les golpeó fuerte, por eso como GPSA realizamos una donación de 3000 kg de arroz y varios kilos de carne para pobladores de seis asentamientos colindantes a la Estancia Paso Kurusu.

Mediante el acompañamiento, la empresa está asistiéndolos con semillas, insumos y acopio de los granos de soja que producen

Un mensaje final
Debemos seguir trabajando en forma unida y pensando en positivo, porque tarde o temprano la crisis pasará. Cuando se vaya normalizando debemos estar preparados para tomar nuevos desafíos, porque el campo no para. Este país depende de la agricultura y de la ganadería, por eso debemos seguir esforzándonos para superar esta situación.

 

FICHA PERSONAL
Fabián Pereira es ingeniero agrónomo egresado de la Facultad de Ciencias Agrarias (FCA) de la Universidad Nacional de Asunción (UNA). Se desempeña como director Comercial en el Grupo Pereira S.A. (GPSA), en donde lidera junto a su padre, Graciano Pereira, y sus hermanos proyectos de alto impacto en el país.

 

[Entrevista publicada en la edición Nº 67 – Mayo de Revista Productiva, página 8]

[Foto icon-camera : Revista Productiva]