La utilización de granos en las dietas de terminación de bovinos viene creciendo en el país, conforme el reporte del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA).

Se estima que uno de cuatro animales faenados provienen en la actualidad de un encierre a corral; es decir, prácticamente el 25 % de toda la hacienda sacrificada pasa por un feedlot, en donde la ración a base de granos predomina.

Conforme la proyección, cerca de 500 mil cabezas pasan por el confinamiento antes de ir al frigorífico. En el 2016, la faena en Paraguay fue de 2,2 millones de cabezas, pero para esta temporada se prevé una leve reducción por la falta de hacienda de reposición.

El reporte indica que la mayoría de los establecimientos de engorde se localizan en la región Oriental del país, en donde se concentran los granos. A su vez destaca que el uso del grano acelerará la producción de carne de res en Paraguay y también mejorará la calidad de la carne, proporcionando mayor consistencia.

El USDA sostiene que los retornos económicos son positivos en todas las diferentes etapas de la producción ganadera. En Paraguay la terminación de ganado con maíz es muy rentable y los ganaderos locales convierten 8-9 kilos del cereal a un kilo de carne. Muchos de los grandes frigoríficos tienen feedlots (corrales de engorde) propios para abastecer sus líneas de producción.

Los novillos suelen entrar en un feedlot cuando pesan entre 300-350 kilos y pasan entre 80-120 días allí hasta que estén listos para el sacrificio. Se espera una expansión en la alimentación con cereales en el sector ganadero en Paraguay durante los próximos años, sostiene el informe semestral del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA).