La Asociación de Productores de Semillas del Paraguay, Aprosemp, cierra un año complicado por el bajo uso de semillas certificadas que se tuvo en esta zafra ante el panorama de los bajos precios de los granos, informó el presidente de la asociación, Roberto Lang.
“Las condiciones internacionales no se están dando. El productor en vez de comprar una semilla certificada hizo uso propio y eso afectó al sector semillero”, dijo.
Remarcó, esta situación se dio a pesar de que lo aconsejable es utilizar semillas certificadas por la garantía de alcanzar mayores rendimientos. La producción semillera se volvió muy riesgosa en los últimos dos años a tal punto que pequeños semilleros que se dedicaban a la producción hoy se limitan a prestar servicios a las semillerías más grandes, informó Darío Bernal, responsable legal de Tupí S.A. de Industria y Comercio de Granos.
“Los grandes semilleros venden el 50% de su producción y el resto vende como granos a precios que no compensan los costos de producción”, destacó.
“El productor ahorra donde piensa que puede ahorrar, tal vez usando semillas propias o fertilizando menos porque evidentemente lo que más le preocupa es tomar menos créditos. Sí va a tener que recurrir a los insumos si encuentra una plaga o una enfermedad”, aportó por su parte Sebastián Eyzaguirre, director de Semillas Kemagro.
La Unión de Gremios de la Producción (UGP) anunció que los precios de los productos agrícolas se mantendrían bajos por lo menos por dos años más. “La soja que es el gran amortiguador comenzó a fallar y los demás cultivos no paliaron sus pérdidas a pesar de los rendimientos”, dijo el presidente Héctor Cristaldo.
Toda la cadena agrícola afronta dificultades. No obstante, tomando como referencia los volúmenes de producción, el Banco Central del Paraguay destacó que en este 2015 el sector primario tuvo un incremento 3,6% con relación al 2014.
Fuente: UGP
