El Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAPA) de Brasil confirmó ayer un caso positivo de encefalopatía espongiforme bovina (EEB), también conocida como mal de la vaca loca, en un animal macho de nueve años en una pequeña propiedad del municipio de Marabá (estado de Pará). Aún falta definir si se trata de un caso atípico de la enfermedad, sin embargo, el Gobierno brasileño ya suspendió temporalmente sus exportaciones de carne a China.

 

Anoche Brasil confirmó un caso de EEB en un pequeño establecimiento del municipio de Marabá, estado de Pará, luego de que las pruebas remitidas a un laboratorio en Canadá dieran positivo. La enfermedad fue diagnosticada en un animal macho de nueve años criado sobre pastos, que posteriormente fue sacrificado y su cadáver fue incinerado en el lugar, anunció el MAPA.

 

El caso sospechoso de encefalopatía espongiforme bovina fue notificado el lunes de esta semana, y desde ese momento el MAPA adoptó todas las medidas gubernamentales necesarias para la protección del mercado brasileño de la carne.

 

Todas las medidas están siendo adoptadas inmediatamente en cada etapa de la investigación y el asunto está siendo tratado con total transparencia para garantizar a los consumidores brasileños y mundiales la reconocida calidad de nuestra carne”, destacó el ministro Carlos Fávaro.

 

Brasil, asimismo, notificó a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) y las muestras tomadas fueron enviadas al laboratorio de referencia de la institución en Alberta, Canadá, que podrá confirmar si el caso es atípico. Desde el servicio veterinario oficial brasileño también informaron que se está realizando la investigación epidemiológica que puede ser continuada o terminada según el resultado.

 

El último caso de EEB en Brasil se registró en 2021 después de la confirmación de dos casos atípicos de la enfermedad en dos plantas cárnicas. En ese tiempo, las exportaciones a China se suspendieron entre setiembre y diciembre, por lo que bajó el precio del ganado y de la carne destinada a exportación, señalan Eurocarne y la Agencia de Información de Paraguay (IP).

 

Efectos. A raíz de esta situación, el Gobierno brasileño suspenderá desde este jueves y de forma temporal todas las exportaciones de carne a China, el principal destino de la proteína roja de este país, como parte del protocolo sanitario oficial que rige en Brasil. No obstante, el diálogo con las autoridades pertinentes se está intensificando para demostrar toda la información y el pronto restablecimiento del comercio de carne brasileña, confirmaron.

 

Desde Paraguay señalan que con la aparición de la enfermedad se paraliza preventivamente el mercado de hacienda para faena. Un aspecto clave a tener en cuenta es que Brasil es el principal exportador mundial de carne bovina y una noticia así genera que sus mercados compradores puedan frenar importaciones, subraya la Agencia IP.

 

Así también, la Agencia IP indica que podría haber un beneficio temporario para las exportaciones locales tras la confirmación de EEB en Brasil, al menos hasta que China vuelva a aceptar la carne brasileña. Además, en el caso de Paraguay, se aplican restricciones a la comercialización mundial de carne vacuna, que hasta el 31 de diciembre del 2023 continuarán limitados los 7 cortes parrilleros de mayor consumo en el mercado interno.

 

En el 2022 Paraguay exportó a Brasil 39 357 toneladas de carne bovina por USD 214,1 millones. En enero de este año Brasil se convirtió en el segundo mejor destino de la carne bovina nacional, desbancando a Rusia de la segunda posición y solo por detrás de Chile, ya que se enviaron 2404 toneladas por USD 13,2 millones.

 

Por otra parte, se menciona la posibilidad de los precios internacionales registrarían fuertes subas tras la salida de Brasil del mercado chino, teniendo en cuenta que el país vecino representa entre 35 y el 40 % de las importaciones del gigante asiático.

 

Ahora con la exclusión de la carne brasileña del mercado cárnico chino, la oferta temporaria deberá ser cubierta por países como Uruguay, Argentina, Estados Unidos, Australia o Nueva Zelanda.

 

EEB. La encefalopatía espongiforme bovina es una enfermedad progresiva y mortal del ganado bovino adulto, causada por una proteína anormal denominada “prion”, con un prolongado periodo de incubación que va de dos a ocho años o en ocasiones más. Se caracteriza por la degeneración del Sistema Nervioso Central (SNC), la cual se presenta con alteraciones de comportamiento, locomoción y sensibilidad.

 

Si bien no existe tratamiento ni vacuna para esta enfermedad, para prevenirla se recomienda evitar la alimentación de rumiantes con harina de carne y hueso; controlar la importación de animales vivos, productos y subproductos de origen animal, y también comunicar inmediatamente los casos de presencia de animales con síntomas nerviosos y los hallados muertos.

 

Desde 1996 se encuentra vigente en nuestro país el Programa de Vigilancia de La encefalopatía espongiforme bovina, mediante la Resolución 381/96 del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), por la cual se incluye a la EEB como una enfermedad de declaración obligatoria.

 

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