En el primer mes de este año las exportaciones de granos de soja cayeron 57 %, ya que hubo una reducción de 43 000 toneladas, en comparación con el mismo periodo del 2022, según los datos de Comercio Exterior del Banco Central del Paraguay (BCP).

 

Al inicio de un nuevo ciclo de envíos de la soja paraguaya se registró un comportamiento negativo. Sin embargo, hay que considerar que, de acuerdo con nuestro análisis, el contexto de ambos periodos es totalmente diferente, ya que en enero de 2022 aún había un buen remanente de la excelente cosecha 2020/2021, mientras que en el primer mes de este 2023 ya ni siquiera había materia prima, producto de la peor campaña registrada en la historia de nuestro país, la 2021/2022, y a esto se le suman los resultados poco satisfactorios alcanzados en las primeras cosechas de la actual zafra agrícola.

 

En enero de este año Paraguay exportó 32 929 toneladas de la oleaginosa, una merma interanual de 43 715 toneladas (-57 %), con relación a las 76 644 toneladas enviadas en el mismo lapso del año pasado.

 

Igualmente, la caída de exportaciones afectó al ingreso de divisas, considerando que al 31 de enero de 2023 se generaron USD 18,2 millones, USD 15,1 millones menos que el primer mes del 2022, cuando los envíos permitieron el ingreso de USD 33,3 millones.

 

Cotizaciones internacionales. En el contexto internacional, en enero del 2023 el precio de la soja en la Bolsa de Rosario aumentó 0,1 % en comparación con diciembre de 2022, mientras que respecto a enero del año anterior, presentó un incremento de 2,4 %.

 

Asimismo, hubo un comportamiento al alza de la cotización en el mercado de Chicago, ya que en enero la oleaginosa cotizó en 554,82 USD/tonelada, un incremento del 8 %, respecto a los USD 513,64 registrados durante el mismo mes del 2022. Si se compara con diciembre del año pasado, se tuvo una variación positiva del 2,4%.

 

La banca matriz aclara que la suba de los precios internacionales de la soja respondería a la caída de los stocks mundiales de la oleaginosa y a la reapertura de la economía en China, con el final de sus restricciones por Covid-19. No obstante, las abundantes lluvias registradas en Argentina y Brasil han mejorado las perspectivas de producción para la región, por lo cual limitaron las presiones alcistas en la cotización de enero.