El Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (Senave) recuerda que desde el 1 de junio está en vigencia la pausa fitosanitaria para el cultivo de soja en Paraguay, que se extiende por 90 días, periodo en el cual las áreas de cultivo destinadas a la producción de granos y semillas deben permanecer libres de soja guacha y hospedantes alternativos, con el objetivo de minimizar los efectos del ataque de la roya asiática (Phakopsora pachyrhizi). En caso de detectarse irregularidades, los infractores serán pasibles de sanciones.

 

La pausa, establecida mediante las resoluciones N° 071/11 y N° 633/17, para las regiones Oriental y Occidental, respectivamente, se extiende durante 90 días, del 1 de junio al 30 de agosto en la región Oriental y del 15 de junio al 15 de setiembre en la región Occidental, periodos en los cuales las áreas de cultivo destinadas a la producción de granos y semillas deben permanecer libres de soja guacha y hospedantes alternativos, con el objetivo de minimizar los efectos del ataque de la roya asiática de la soja (Phakopsora pachyrhizi).

 

El Senave explica que durante la pausa fitosanitaria los productores pueden optar por otros rubros de renta, considerando que las áreas de cultivo solamente deben estar libres de soja, de manera a reducir la fuente de inóculo del hongo causante de la roya asiática, que puede provocar importantes pérdidas productivas y económicas.

 

La Dirección de Protección Vegetal aclara que los propietarios o arrendatarios de parcelas de soja tienen la obligación de cumplir o hacer cumplir la normativa, que incluye a depósitos, silos, bordes de caminos internos o áreas de dominio de la propiedad, al igual que todas las instituciones responsables, concesionarias o administradoras de ferrovías, puertos fluviales, aeropuertos, caminos públicos y rutas nacionales.

 

El Senave anunció que, a través de sus oficinas regionales en todo el país, realizará estrictos controles para garantizar el cumplimiento de la mencionada disposición y que, en caso de detectarse irregularidades, los infractores serán pasibles de sanciones.

 

Cabe recordar que la roya de la soja es una enfermedad biotrófica (se nutre solamente de hospedante vivo) cuyo organismo causal no sobrevive en los residuos de cosecha infectados, pero sí lo hace por unos 50 días en las plantas que germinan después de la cosecha, y que bajo condiciones ambientales favorables se desarrolla muy rápidamente infectando al hospedante y causando pérdidas importantes en el rendimiento del cultivo, por lo que las áreas referidas deberán mantenerse libres de plantas verdes en pie.