Luego de subir en las dos jornadas precedentes, la soja cerró con importantes bajas en Chicago, que condujeron a la oleaginosa a un balance semanal ligeramente negativo e interrumpió la secuencia de tres semanas alcistas consecutivas, destaca el análisis de Granar. Es así que con una pérdida de USD 7 el grano concluye la rueda con valores de USD 438,17 la tonelada en la posición de mayo y USD 442,95 en la de julio.   

 

El contrato de mayo de la soja perdió USD 7,16, mientras que el de julio USD 7,44. De acuerdo con el análisis de Granar, la tónica bajista de la rueda, impulsada por ventas del lado de los especuladores, incluyó al aceite (la posición mayo perdió USD 25,36 y quedó con un ajuste de USD 1050,26), que operó en línea con las bajas registradas por el aceite de palma en Malasia, y a la harina (mayo resignó USD 5,73 y quedó en USD 373,79).

 

Entre las razones que influyeron en la caída del mercado de la soja se incluyeron las buenas previsiones para la inminente cosecha en Argentina, gracias a la mejora en las condiciones ambientales tras las lluvias que amenazaron con anegar amplias zonas agrícolas. Esto fue revalidado ayer por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, que mantuvo en 52,50 millones de toneladas su previsión para la campaña.

 

Además, influyeron la continuidad de la cosecha en Brasil; la devaluación del real contra el dólar, que mejora la competitividad de las exportaciones brasileñas y que estimula a los agricultores a vender; la persistente ralentización de las exportaciones estadounidenses mientras China mantiene su interés en Sudamérica, y las lluvias que se registran –y las previstas– sobre el Medio Oeste.

 

El maíz también cerró la rueda con ligeras bajas, pero logró un balance semanal levemente alcista en Chicago. La posición de mayo quedó en USD 172,92, mientras que la de julio en USD 177,94, lo que implica pérdidas de USD 0,60 y USD 0,79, respectivamente, respecto de la jornada precedente.

 

El trigo, sin embargo, terminó la rueda y la semana con precios en alza en el mercado estadounidense, impulsado por compras de los inversores y por una fuerte mejora de las cotizaciones en el Euronext, que así reaccionó ante la devaluación del euro contra el dólar y frente a la caída prevista de la oferta en la campaña 2024/2025 por las complicaciones que atraviesan los cultivos en varios países del bloque comercial.

 

La posición de mayo cerró en USD 203,84 la tonelada (ganó USD 2,94) y la de julio en USD 209,26 (aumentó USD 2,76).