La prolongada sequía que arrastró el Chaco y la buena condición de los precios repercutieron en los índices productivos de la ganadería, pues estos factores impulsaron la venta de vientres, y es así que en los últimos dos años la industria frigorífica faenó entre el 22 y 25 % de las vacas preñadas. Por tanto, el gran desafío es apuntar a la reposición de la hacienda mediante la valorización y la protección de la “fábrica”, indicó a Nación Productiva el Dr. Egon Neufeld, director general de Agroganadera Faro Norte S.A.
Uno de los puntos críticos actuales de la ganadería paraguaya es la poca oferta de animales de reposición. En este año gran parte de la reducción de vientres se debe a los efectos negativos del clima (sequía) y la condición de buenos precios que impulsó la comercialización de las vacas, incluso preñadas, ya que varios productores se vieron obligados a pagar las cuentas de esa forma para recuperar la inversiones realizadas.
En ese punto, en el programa Nación Productiva, donde abordamos la “Tendencia de reposición de hacienda y estrategias para mantener los índices productivos”, conversamos con el Dr. Egon Neufeld, director general de Agroganadera Faro Norte S.A, quién ratificó la importancia de valorizar los vientres y proteger la fábrica de la ganadería. Indicó que se estiman 500 000 cabezas menos de ganado por la gran cantidad de vacas y vaquillas faenadas en los últimos años.
Especificó que en los últimos dos años la industria frigorífica nacional llegó a faenar entre el 22 y 25 % de las vacas preñadas. Explicó, además, que la tendencia es que los precios de la hacienda paraguaya sigan aumentando a raíz de la demanda.
Subrayó también que la reposición de la hacienda debe crecer y fortalecerse para poder cargar los campos del Chaco. “Boquerón y Alto Paraguay pueden recibir 200 000 vientres para reponer los campos vacíos o semivacíos, dependiendo del clima”, destacó.