Las industrias frigoríficas locales aumentaron 8 % la faena al cierre del primer semestre de este año, pese a la pandemia del coronavirus que afectó a todas las actividades económicas. Estas cifras se desprenden del informe mensual del Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Animal (Senacsa).

 

En este primer semestre de 2020 se sacrificaron 890 125 cabezas, un 8 % más en relación con el mismo periodo del año anterior, cuando se abatieron 819 052 cabezas; es decir, 71 073 animales más pasaron por la industria en estos primeros seis meses, lo que ayudó a ampliar la capacidad operativa de las plantas, pese a la situación de pandemia que había sido utilizada como argumento para reducir la actividad de las industrias.

 

Durante junio las industrias sacrificaron 163 018 cabezas, un volumen 14 % superior al mismo mes del año pasado, cuando se abatieron 140 052; es decir, en el sexto mes del año en curso se faenaron 22 966 cabezas más.

 

Considerando este ritmo de faena registrado por las industrias frigoríficas locales, se proyecta una cantidad de 1,8 millones de cabezas durante el 2020.