Irlanda detectó un caso atípico de encefalopatía espongiforme bovina (EEB), más conocida como la enfermedad de la vaca loca. Tras la muerte del animal, el hecho fue notificado al Departamento de Agricultura, Alimentación y Medio Marino (DAFM) de ese país, a fin de llevar a cabo los procedimientos correspondientes.

 

La infección fue confirmada luego de ser llevada una muestra al laboratorio ante la sospecha de un productor ganadero irlandés.

 

Posteriormente, el DAFM señaló que el caso positivo se trató de una vaca de 14 años que murió en una granja. El animal fue llevado a un refugio donde se realizaron los procedimientos correspondientes.

 

Por su parte, la agencia RTE de Irlanda indicó que el animal nunca entró en la cadena alimentaria, por lo que se descartaron los riesgos para la salud humana. La vaca era de raza limousin.

 

Según el informe del portal Eurocarne, la vaca mostró síntomas a mediados de marzo, ya que presentaba ataxia y permanecía echada. A mitad del quinto mes del año, el animal murió y se recabaron muestras que luego fueron enviadas al laboratorio nacional de referencia.

 

Luego se conocieron los resultados que dieron positivo a EEB. El animal contaba con antecedentes de signos neurológicos.

 

Sin dudas, esta noticia fue muy importante para el sector ganadero, considerando que Irlanda exporta el 90 % de su producción bovina.

 

Ya con este nuevo caso atípico, las exportaciones a China están en espera. Es un golpe porque se han exportado más de 3000 toneladas de carne de res irlandesa a China en lo que va del año”, destacó la agencia RTE.

 

La encefalopatía espongiforme bovina (EEB) es una enfermedad progresiva, degenerativa, con daño neurológico generalizado, que tiene un largo período de gestación en el ganado bovino (hasta 8 o 10 años) y concluye con la muerte del animal.

 

[Fuente: Agrofy News]