Tras los estudios realizados en Brasil y México, dos de los tres mercados agrícolas más grandes de la región, se observa un preocupante aumento del comercio ilegal de productos de protección de cultivos en Latinoamérica, según la publicación de CropLife Latin America.

 

Estudios sobre la problemática del comercio ilegal de insumos agrícolas publicados en Brasil y México, dos de los tres mercados agrícolas más importantes de la región, muestran un gran porcentaje de ilegalidad en la comercialización de estos productos.

 

Los análisis realizados por el Instituto de Desarrollo Económico y Social de Fronteras de Brasil (IDESF) indican que el 25 % del mercado de agroquímicos de Brasil es ilegal. El estudio describe las formas en que se comercian las versiones ilegales de esos productos, siendo las más comunes el robo, falsificación y contrabando.

 

Según el informe, solo en el 2020 la Policía Rodoviária incautó 70 toneladas de agroquímicos ilegales en carreteras brasileñas. El Estado más impactado según cifras de incautaciones es Mato Grosso Do Sul, seguido por Minas Gerais y São Paulo. Las rutas más usadas inician en la zona de la triple frontera, particularmente en Foz do Iguazú pasando Río Grande del Sur y Cascavel que se ha convertido en una intersección y especie de hub (concentrador) del comercio ilícito.

 

La identificación de rutas ha servido para construir mapas de calor a partir de incautaciones históricas durante operativos como Horus, Muralha, Agata, Zephyros, Principio Ativo, QR-CODE, Webcida y Piratas do Campo. Los mapas de calor son fuentes de inteligencia útil para planear operativos, e incluso sugieren los momentos más críticos. Por ejemplo, durante enero existe un mayor tráfico ilegal, que representa el 50 % de las incautaciones de todo el año.

 

Esta tendencia tiene relación con el fin de la zafra de soja cuando se requiere mayor control fitosanitario. El diferencial cambiario o impuestos diferentes entre países vecinos también son disparadores del comercio ilegal.

 

Un caso específico es del benzoato de emamectina que ha sido motivo de contrabandeo desde Paraguay, Uruguay y Bolivia hacia Brasil. Una característica del contrabando proveniente de Paraguay son las diferencias en concentraciones de formulación autorizadas en ambos países. En Brasil está autorizada una formulación al 5 % de concentración, mientras que en Paraguay pueden llegar hasta el 95 %. “Consecuentemente, formulaciones mayores al 5 % encontradas en Brasil no pudieron ser importadas legalmente”, indica el estudio.

 

Otro blanco de contrabando hacia Brasil es el paraquat, ya que su registro fue cancelado y había plazo a julio del 2021 para agotar inventarios. Como el producto aún tiene registro válido en Argentina, Uruguay y Paraguay, se espera que supla el uso de agricultores brasileños acostumbrados al producto.

 

El estudio del IDESF alerta sobre el involucramiento del crimen organizado con posibles vínculos al narcotráfico y lavado de dinero. Esta investigación se realiza cinco años después del realizado por la Federaçao das Indústrias do Estado de São Paulo (FIESP) que ya había encontrado un 24 % de producto ilegal existente en Brasil.

 

Por otro lado, el estudio del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC) de México categorizó la ilegalidad del mercado mexicano de plaguicidas de forma similar al Brasil. México posee productos sin registro, falsificados que aprovecha los envases de los originales, contrabandeados, adulterados y robados, por lo cual las cifras históricas de incautación permiten levantar mapas de calor del territorio para cada modalidad de comercio ilícito.

 

Se estima que el comercio ilegal de plaguicidas en México asciende a un 15 o 20 % de los USD 1,4 billones anuales que representa dicho mercado. Además, el ONC revisó sitios de venta en línea de agroquímicos, encontrando oferentes del producto ilegal que utilizan este canal.

 

Los resultados de ambos estudios se unen al del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) que encontró que el mercado de productos ilegales ascendía a USD 45 millones anuales en el 2019.

 

[Fuente: CropLife Latin America]