El arroz genéticamente modificado (GM) fue desarrollado por científico suecos que podría contribuir a hacer ambientalmente más amigable el cultivo; además alcanza mayores rendimientos.

ientíficos suecos han desarrollado plantas de arroz genéticamente modificadas (GM) o transgénicas que reducen sus emisiones de metano y logran mayores rendimientos.

Se calcula que anualmente los campos de arroz liberan entre 60 y 100 toneladas de metano (CH4) a nivel mundial, por lo que contribuyen sustancialmente al calentamiento global del planeta. El metano es un gas de efecto invernadero 20 veces más potente que el dióxido de carbono.

Siendo conscientes de este problema, los investigadores desarrollaron este arroz GM para expresar un gen de la cebada que hace que la planta produzca menos metano y que el rendimiento del grano sea de un 43% más elevado. Estas variedades de arroz ya cuentan con tres años de ensayos de campo con resultados exitosos. 

Adicionalmente, se ha observado una disminución más alta en la emisión de metano durante el verano, consiguiendo de un 0,3 a un 10 por ciento menos que las variedades convencionales.

La reducción de las emisiones de metano en invierno del arroz transgénico es menor que las alcanzadas en verano ya que las temperaturas tienen un papel clave en ello. “Se espera que el cultivo de arroz aumente en el planeta” para alimentar a una población mundial creciente, afirma el biólogo Paul Bodelier, “cualquier reducción en esta área es muy importante”. 

Este arroz GM sería una herramienta más sostenible y amigable con el ambiente y, además, permitiría a los agricultores tener mayores rendimientos.

Fuente: Fundación Antama